Este edificio se ubica en la nueva zona del ensanche de la ciudad hacia el sur tras el cubrimiento del río Huerva. Se trata de un proyecto redactado en 1934 con anterioridad a la Guerra Civil, por el arquitecto italiano Carlo Baratto Besatti y que sufrió un retraso en su construcción motivado por la contienda. El edificio fue acabado en 1940 con un proyecto firmado por el arquitecto Manuel Muñoz Casayus, ya que el arquitecto italiano no podía firmar en España.
Su mayor interés está en la organización de un sistema de patios abiertos que permite que todas las estancias sean exteriores. En la composición de la fachada destaca la horizontalidad, conseguida por el efecto del grafiado y los relieves de la fachada que permiten ligar varias ventanas separadas, unificándolas y creando unas bandas horizontales que recorren toda la fachada.